Descripción
Set de seis (6) servilleteros elaborado en coco. ¡Un producto delicado y que le dará un toque de distinción y tradición a tu mesa!
De las ramas del árbol cocotero y con la técnica de la cestería, se producen sombreros y canastos de diferentes estilos. Con la cáscara se elaboran vasijas, salseras, cucharas, aretes y hebillas, entre otros. Del mesocarpio fibroso, que recubre el coco, comúnmente llamada ‘bonete’, se tejen cuerdas, esteras, tapices, tapetes y se utiliza como abono en jardinería.
En un recipiente con agua se dejan remojando las cáscaras de coco, por un espacio de diez a quince minutos, hasta que les penetre bien el agua; luego, se procede a limpiar la parte externa con un cuchillo, dejándola totalmente limpia de estopa, y se raspa con una cuchara; después se inicia el proceso de pulido a mano con un lija de agua, hasta lograr una pieza bien acabada. Se manejan desde superficies con acabados semipulidos, en las que se aprecian venas y texturas de la cáscara, hasta muy finos con felpa. El coco debe pulirse antes de cortarlo y sacarle el agua. Se arman los moldes (en cartón cartulina) de las piezas a elaborar y se procede a marcarlos sobre el coco. Una vez marcadas las piezas, se cortan con una caladora; a veces, por la magnitud de las mismas, es necesario cortar con segueta; otras requieren de taladro como, por ejemplo, piezas para aretes, collares y cinturones, entre otros.
Dependiendo del producto a elaborar, se utilizan diferentes tipos de unión: con pegantes para adherir la tela de singa a bases de MDF; para tableros de relojes; y para tornillos y bisagras en productos como cofres. Los discos de lija se elaboran para continuar el proceso de pulido, usando el esmeril.
Finalmente, se hace el acabado por el borde y se le da brillo utilizando una felpa. El trabajo del coco en Colombia lo vienen realizando artesanos en los departamentos de la costa atlántica y pacífica principalmente.
Especificaciones
Alto | 2 cm |
Peso | 77 g |
Color | Negro |
Distinciones | |
Diámetro | 5 |